
Sal para piscinas y sostenibilidad: una alternativa más natural y eficiente
La sal para piscinas y su relación con la sostenibilidad es un tema cada vez más relevante para quienes buscan sistemas de desinfección más responsables con el entorno. En lugar de depender del cloro químico tradicional, muchos propietarios y gestores de instalaciones acuáticas están optando por soluciones basadas en cloración salina, una tecnología que emplea sal común para mantener el agua limpia y segura, con beneficios medioambientales, sanitarios y operativos.
En Jumsal, como productores de salde alta pureza, sabemos que el tipo de sal que se utiliza marca una diferencia real en la eficiencia del sistema y en el respeto por el medio ambiente.
¿Por qué la sal para piscinas es una opción más sostenible?
La cloración salina consiste en generar cloro de forma natural a partir del cloruro sódico disuelto en el agua, mediante un proceso de electrólisis. Esta reacción permite obtener hipoclorito sódico, un desinfectante eficaz que elimina bacterias, virus y algas, sin necesidad de añadir cloro químico externo.
Al tratarse de un sistema cerrado y autorregenerativo, la sal se reutiliza constantemente dentro del circuito. Esto reduce la necesidad de reponer productos químicos, disminuye la generación de residuos y elimina el uso de envases plásticos asociados al cloro convencional.
Además, al evitar la manipulación de sustancias tóxicas o inflamables, la cloración salina mejora la seguridad tanto para los usuarios como para el personal de mantenimiento, y evita emisiones peligrosas en el entorno de la instalación.
Beneficios medioambientales y operativos
El uso de sal para piscinas en sistemas de cloración salina genera una serie de beneficios tanto a nivel ecológico como en el funcionamiento diario:
1. Reducción de residuos químicos
Al prescindir de estabilizantes, aditivos o cloros industriales, se minimiza la contaminación del agua y del entorno. Tampoco se generan subproductos nocivos como las cloraminas, responsables del típico olor fuerte y de la irritación ocular en piscinas tratadas con cloro químico.
2. Menor huella de carbono
Al reducir la necesidad de transportar y almacenar productos envasados, disminuye el impacto logístico y las emisiones asociadas. La sal es un recurso abundante, económico y más sostenible en todo su ciclo de vida.
3. Ahorro en mantenimiento
La cloración salina requiere menos intervención manual, menos ajustes químicos y permite automatizar la dosificación, lo que se traduce en un funcionamiento más eficiente y con menor consumo energético.
4. Mayor vida útil del agua
Con un control adecuado del sistema, es posible mantener la misma agua durante más tiempo, reduciendo la frecuencia de vaciados y llenados. Esto se traduce en un importante ahorro de agua, un recurso cada vez más valioso.
La importancia de una sal de calidad en la sostenibilidad del sistema
Para que un sistema de cloración salina funcione de forma eficaz y sostenible, es fundamental emplear una sal de alta pureza, sin antiapelmazantes, aditivos ni residuos metálicos. Este tipo de impurezas puede dañar los electrodos del clorador, afectar la calidad del agua y acortar la vida útil del sistema.
En Jumsal, producimos sales específicas para aplicaciones técnicas como la cloración salina, a través de un proceso controlado que garantiza la pureza del producto y su comportamiento óptimo en sistemas de electrólisis. Nuestra sal para piscinasse disuelve fácilmente, no deja residuos insolubles y contribuye a una desinfección constante, eficiente y segura.
Gracias a nuestras capacidades productivas y logísticas, podemos abastecer tanto a grandes instalaciones públicas como a consumidores particulares, siempre con el compromiso de sostenibilidad que nos define.