Mantenimiento de una piscina con sal
Una piscina es un elemento arquitectónico que proporciona salud, bienestar y diversión a quienes la disfrutan. Para sacarle el mejor provecho y tenerla siempre en óptimas condiciones, es indispensable seguir los pasos para el mantenimiento de una piscina con sal. La sal gema utilizada es también de vital importancia, como veremos a continuación.
Pasos para el mantenimiento
Según la cantidad de personas que la usen y la frecuencia con que se haga, la limpieza de una piscina deberá realizarse al menos una vez a la semana. Esto es particularmente importante en las que se encuentran descubiertas y a la intemperie.
Limpieza de superficies
Los aspiradores y los limpiafondos son equipos imprescindibles para dejar todas las superficies interiores libres de suciedad y del moho que hubiera podido formarse. Existen muchos modelos en el mercado, pero es fundamental que los cabezales y cepillos de que están dotados sean curvos y flexibles para poder alcanzar los rincones.
Lavado de los equipos
Toda piscina cuenta con una bomba, un filtro y varios chorros de presión. Este último componente sirve para impulsar las hojas, insectos o cualquier otro desperdicio que se encuentre en la superficie hacia las espumaderas. De esta forma no llegan hasta el filtro, lo que podría obstruirlo.
Todos estos elementos deben limpiarse con agua a chorro de la manguera al menos una vez a la semana. En determinadas épocas del año es posible que las espumaderas se llenen rápidamente, por lo que hay que retirar los restos con más frecuencia.
Sal para piscinas
La cloración salina es un sistema que utiliza sal gema para generar hipoclorito de sodio mediante electrólisis, que actúa como desinfectante del agua. Destruye las bacterias, los mohos y las algas que suelen proliferar en el agua y ensuciar las piscinas. El proceso ocurre en la célula del clorador salino, un equipo especializado en esta función.
Es una opción muy popular entre quienes poseen una piscina, ya que la presencia de sal reduce la absorción de sustancias químicas e incrementa la sensación de bienestar. El daño que causa el cloro a la piel, al cabello y a los dientes no se produce en las piscinas de agua salada.
Hay que seguir las instrucciones del fabricante del clorador salino para controlar los parámetros que se describen a continuación. Este aspecto es fundamental al utilizar sal para piscinas.
- El pH indica la acidez del agua, que es recomendable analizar a diario para ajustarlo en caso necesario. El nivel ideal es de 7,2 a 7,6.
- La concentración de sal debe estar entre 2 y 6 gramos por litro. Para modificarla, se añade más sal si es baja o se cambia parte del agua si está elevada.
- El cloro libre residual es el producto generado in situ tiene poder desinfectante. Debe estar entre 0,6-1,5 partes por millón.
Tipos de sal a utilizar
El producto más adecuado es la sal gema o sal mineral procedente de un diapiro salino. Este origen geológico y el muy elevado nivel técnico para obtener el producto garantizan que está libre de sustancias contaminantes. Nuestra empresa, Jumsal, extrae el cloruro de sodio en la Sierra del Carche en Jumilla (Región de Murcia) para ofrecer estos productos.
- Sal húmeda: grano natural, molida, molida corriente y triturada para salazón o fomento.
- Sal seca: tipos 00, 1, 2 y 3, o en pastillas P25.
- Sal vacuum húmeda: tipo TTH.
- Sales vacuum secas: TT1, TT1 yodada, TT1 nitritada, TT00 y en pastillas.
La sal mineral es un elemento puro, natural, procedente de cavidades subterráneas aisladas. Funciona perfectamente en la célula del clorador salino y, por lo tanto, es el producto ideal para el mantenimiento de una piscina con sal. El bienestar y el sano entretenimiento están garantizados.